¡Que bien lo pasamos! Gracias Jose Vicente

Nada más y nada menos que cuatro años, cuatro, llevamos jugando en el Inef una vez acabado el campeonato. No es de extrañar, por tanto, la preocupación que se generó en nuestras filas al conocerse la noticia de lo sucedido en la primera jornada. Nos veíamos capitidisminuidos sin nuestro codiciado fútbol al aire libre ¿Qué hacer durante los sábados de Julio y Agosto? . . . pronto surgieron ideas alternativas para poder emplear nuestro tiempo de ocio. Veamos algunas de las que han llegado a nuestra redacción.

Nacho (que el sábado celebró el ochenta cumpleaños de su padre, ¡muchas felicidades!) propuso hacer una excursión al “Nou Camp” y durante el trayecto rifar unas invitaciones para asistir a un cena coloquio con el presidente de “algo más que un club” sobre la creación de una liga independiente de la opresión fascista española, por supuesto en la lengua que todos hablamos en la intimidad. La idea, que en principio fue bien acogida, no suscitó los apoyos suficientes a pesar de la gran campaña mediática protagonizada por Luciano y por Santi.

Adalberto que está insuperable en todos los aspectos, incluido el físico (pesa veinte kilos más que un servidor), planteó deleitarnos con un cursillo de aeróbic, acelerado, que él mismo impartiría. En el que se abordarían técnicas de relajación, incluida su famosa teoría sobre los orificios; técnicas alimenticias, con su adagio “come un poco, pero de todo y de todos”; técnicas para el fortalecimiento de la musculatura, instruyéndose en el modo y manera de convertir una barriguita en un solo y voluminoso abdominal; y otra muchas enseñanzas iniciáticas encaminadas a la obtención de un cuerpo grácil, inmarcesible y sutil.
Solo logró convencer a D. Ignacio, que va por su cuarta juventud, y a Eli que muy respetuoso con su Señor Delegado al verle por los suelos, decidió emularlo.

Requeno, siempre a la última, planteó realizar nuevos capítulos de la afamada serie televisiva “V”. A la sazón nos deleitó enfundándose la indumentaria que se luciría en los capítulos: casco estratosférico oscuro, guantes con la “V” imperecedera, chupa “niké” (éste aprende rápido) y vehículo recordatorio de la serie infantil “los súper sónicos”.

Pero ninguna de las propuestas convencieron plenamente al auditorio y decidimos ponernos en manos del maestro José Vicente que con dos pases de pecho y unas chicuelinas nos arregló el problema.

En definitiva que las aguas vuelven a su cauce y que esto es más divertido que el fútbol sala. Os esperamos el próximo sábado a las diez y media. ¡¡Sed puntuales!!

Hizo un buen día, nos dió tiempo para acampar, hacer las últimas gestiones de la semana, cambiar de calzado . . .

. . . incluso para pasear con los amigos

También tuvimos escuela de fútbol para principiantes. Aunque unos están más atentos que otros.

Que cosas tan bonitas las que dice el Sr. Requeno. No nos extraña el aprecio que le tienen sus pupilos.